miércoles, 11 de marzo de 2009

PARA LAS ALMAS SENSIBLES

bueno les mando un cuentito chiquito,
PUREZA
Me estaba lamiendo las heridas, cuando de repente siento un rico aroma. Entonces de un tirón salto del piso y voy hacia la puerta, la rasco con mis patas delanteras a toda velocidad, ladro bien fuerte, trato con mi hocico y cabeza de intentar moverla, pero nada.

Sigo percibiendo ese aroma que se filtra por los laterales de la puerta, y veo como juega en el aire y llega a mí golpeándome pero sin generarme dolor. Me quedo unos segundos o quizás minutos mirándolo, cuando percibo que el tiempo corre diferente, que ya no corre, que solo pasa a mi lado. Busco torpemente una pelota que tengo ya muy gastada, la zarandeo para un lado y para el otro, se me escapa y entonces saltando voy tras ella. Luego de alcanzarla una vez más, noto que al rebotar va dejando una leve estela como continuación de su movimiento. Me quedo quieto ante tal visión y en pocos segundos me olvido y sigo dando vueltas por el comedor.

LLendo de aquí para allá, veo nuevamente el humo que trae ese aroma que antes me genero tanta curiosidad, esta vez la puerta se abre, voy corriendo para pasar y ver de que se trata ese olor y dos manos me detienen en mi breve carrera, alzándome y empujándome para atrás.

Luego de eso decido y en parte mi cuerpo lo pide, descansar y voy aún torpemente a echarme en mi cucha. Donde logro dormirme e ingreso en un extraño sueño, siento que ese aroma proviene del centro de la tierra y que encierra muchas respuestas y que principalmente me eleva a un estado donde la realidad toma otro significado. Dándome mucha tranquilidad. Atraído, voy lentamente a su encuentro, y al estar en contacto se escucha un ruido que me sobresalta. Ya despierto, veo que el sol lleva un buen rato iluminando. Salgo de mi cucha, aún pensando en el sueño o en lo que recuerdo de él y voy a la sala de estar, donde para mi sorpresa veo lo mismo que en el sueño. Ya no es la sala de estar, sino el centro de la tierra emanando ese rico aroma, esta vez es más dulce y se puede notar que es un vegetal…

Con mucho cuidado voy acercándome para ver su interior, casi en el borde arrimo mi hocico y bajo la vista, mis pupilas se agrandan y mi corazón palpita fuerte, lo que veo es algo muy bello, hojas con un atractivo y color que me deslumbran.

Intento bruscamente llegar a ella, cuando estoy muy cerca de tocarla veo que se desdibuja y tratando de hacer foco nuevamente, noto que estoy echado en el sofá junto a mi mejor amigo y el tiempo nuevamente empieza a correr.


Dedicado A Max Power alias “Pomelo”….Q.E.P.D. y a la inocencia y simpleza de los cachorros que tanto nos pueden enseñar.

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